Él le pertenece a ella.
16 de febrero de 2010 by laurísima in

él le pertenece a ella
y ella pertenece al pasado.
y las risas, los gritos y los reclamos,
esos no pertenecen a nadie,
esos se los regalo.

él la ve con ojos llorosos,
ella ya no lo mira, pero se acuerda de él por unas fotos,
unas fotos viejas que se han ido desgastando
igual que las promesas de amor eterno que se perdieron con los años.

ella esta cansada y aburrida,
él esta mirándola y casi no ve nada
¿de qué se habrá enamorado?
¿por qué ella se ve como el humo?
¿por qué él se pasa la vida inventando?

Yo quisiera ser tu.
by laurísima in

Voy a paso firme, tolerante, como quien camina resignado al no tener más opción, cansada del camino me detengo por un momento, te miro, tú no tienes idea de mi presencia, pero yo te observo, recorro tu cuerpo, tus gestos, tu mirada, caminando tan ligera y feliz, tan llena de vida y yo aquí parada con la cabeza llena de intrigas y miedos, y de repente algo comienza a brotar de mí, ese sentimiento de inferioridad, te veo y no te das cuenta de que estas ahí, ¡Porque no me miras!, porque vas tan feliz por la vida cuando yo estoy a una puerta de mi peor pesadilla, sabes? Quisiera decirte que me muero de celos, de envidia, de rabia, de verte tan feliz, imagino que tu si puedes correr, saltar, comer verduras verdes, tu no te preocupas por la sangre ni piensas en el INR, no me importa en este momento si te ha dado viruela, gripe o tienes alguna fractura, es en lo que menos pienso en este momento, estoy concentrada en tu forma de caminar, sonreír, porque sabes? Yo quisiera estar en tu lugar, no tener que seguir caminando y subir esas horribles escaleras y esperar a escuchar mi nombre para adentrarme en una cuarto frío, donde lo único que hacen es hablar mal de mí, hablar de sangre, de dinero, de válvulas y cuartos de hospital, donde solo dan excusas y ninguna explicación del porque yo tengo que entrar a las diez de la mañana a quirófano, mientras tu vas feliz con tu mochilita rosa a la escuela, a mi también me encanta la escuela, pero tuve que dejarla, porque como dicen esas personas – Primero esta tu salud - Y muero de coraje, muero de celos, de no poder salir corriendo y arrebatarte tu mochila rosa y que tu tuvieras que quedarte en mi lugar.
Me quedo un instante más, creo que ya estas por irte, al fin que tu vida sigue, al fin que no me conoces, y no quiero que creas que los celos son exclusivamente para ti, solo que te cruzaste en mi camino, pero vuelve a tu vida, claro que quisiera ser tu, claro que con gusto cambiaría tu vida por la mía, pero ya falta poco para las diez, tu te vas y a mi un par de doctores me esperan..

by laurísima in

Inmaculada era su nombre, usaba pocas palabras, no se complicaba, no discutía, soportaba doce, quince, veinte horas seguidas y se prendía fuego en el cabello, para contrarrestar el de su cuerpo.
No caminaba, se deslizaba por la calles, esperando al próximo, comiendo aire, para matar el hambre. Sudaba en el verano y la gente le pedía su sudor para usarlo como combustible y ella solo los miraba y seguía su camino, sudando y esperando. Llegaba el momento y quemaba su cabello, después soportaba encantada y al final se tendía en la cama pálida y fría.

O que la..
by laurísima in

Cuando no estas aquí me vale madre el mundo.

LLegas y me vale madre el mundo.
Pobrecito el mundo.